Hace unos días y no sé cómo ni por qué Verónica dejó de seguir mi blog, supongo que el aburrimiento pudo con ella. Lo cierto es que me quedé a una vela, pero esa vela es Graciela y no hay mejor lienzo que ese para navegar en letras.
Hoy saludo a Susi que llega al blog con todas las consecuencias, es decir, espero que lo disfrutes y te resulte como tú crees.
Pero la gran noticia es que el mar, el viento y un par de sellos me han traídos el libro de Graciela "Un dios para cada uno" y todavía no he salido de la emoción. ¡Qué grande sos, Graciela! A él me entrego como máximo representante, yo, de los "worstsellers" (me gustó tu palabreja).
En un ay estaré aquí de nuevo.
2 comentarios:
¡Qué buena noticia, Avellaneda ! Me alegra saber que mi hijo de papel llegó sanito después de tan largo viaje, ahora espero que lo leas, y me hagas llegar tu sincera opinión. Pero no adelantes demasiado a tus lectores, porque lo estoy develando lentamente, capítulo a capítulo en mi blog.
P.S: Si tu sincera opinión es horrorosa, acepto algo de maquillaje, tipo "podría ser peor" en lugar de "es lo peor que leí en mi vida" ;P
Un beso Graciela
gracias por esa bienvenida, ahora que tengo más tiempo, porque estoy de baja, me permitire leerte casi todos los días.
un saludo
susi
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