viernes, 12 de febrero de 2010

NO SÉ, NO SÉ

Hoy sólo abro este blog para confesar que tantos días de silencio únicamente significan que no sé qué decir, o escribir. Por supuesto, eso no es ninguna desgracia, más bien creo que es una bendición. Pero como supongo que alguien sigue asomándose por aquí, no me parece justo dar pábulo a cualquier expectativa. Esto no es un lamento ni una búsqueda de palmadas. Es un aviso de que no sé qué haré en lo sucesivo. No es un adiós porque siempre se me dieron mal las despedidas y no estoy seguro de que esto lo sea. Espero que os vaya bien amigos.

6 comentarios:

Azul dijo...

Es muy a tener en cuenta decir que no sabes qué decir. Yo a veces he conseguido buenas conversaciones empezando por soltar eso.
El silencio también tiene su forma y su descripción, y se agradece que nos moldees el tuyo.

Noemí Carro Sánchez dijo...

"Puede ser que llegues a sentir que no tienes nada más que escribir, nada más que decir. Pero no te preocupes, será solo momentáneo. Sigue escribiendo" "¿No escribes? Oblígate, oblígate, Noe".

¿Le resulta familiar? ;)

AVELLANEDA dijo...

Qué jodida es la buena memoria! Eh, Noe?
Gracias. Siempre hesabido que el silencio es una virtud. Debería practicarla.

Noemí Carro Sánchez dijo...

Pero en silencio no se comparte nada, el silencio es la no-existencia de la palabra, lo peor que puede pasarle a alguien que escriba! Yo niego el silencio siempre que sea eso, solo es válido si es pensamiento... que ya es una forma de palabra, he dicho!

Graciela L Arguello dijo...

Vamos, hombre, que ya hemos tenido mucho de tu silencio antes!!! Recuerdo cuando casi nadie pasaba por tu blog, yo te estaba esperando... y así será esta vez Un beso Graciela

AVELLANEDA dijo...

Ya hablaremos, Noe.
Muchas gracias, Graciela. Sabes que aquello fue definitivo. Yo lo suponía y supuse que por lo menos lo que escribía le interesaba a alguien. Gracias