¿Quién recitará este pobre poema?
¿Quién lo leerá siquiera?
¿Quién se tomará la molestia
de saber a quién iba dirigido,
de saber quién fue ella,
cómo empecé a amarla,
casi por descuido,
y cómo desesperadamente la amé
hasta más allá del olvido?
¿A quién le importará
si era dulce y bonita y delicada,
si yo le gustaba
,si ella me correspondía,
si me regaló su tiempo,
si alcancé sus labios,
si paseábamos en medio
de un nudo de abrazos;
si yo realmente la merecía?
¿A quién le importará
si fue o no mía,
si la tuve y después,
otra vez, la deseé
mientras me abandonaba,
mientras yo manipulaba
la tristeza, para que estallara
a la hora prevista:
cuando ella se borraba,
en este pobre poema,
de los versos que yo escribía?
2 comentarios:
ES PRECIOSO ESTE POEMA LLEGA AL CORAZÒN
En realidad todas las horas en que la tristeza estalla son dolorosamente imprevisibles
Un beso Graciela
Publicar un comentario